La actividad acuícola practicada en esta finca soporta un conjunto de servicios ambientales para la hidrología y ecología de las marismas del Guadalquivir.

La acuicultura extensiva y semi-extensiva ha favorecido la presencia de especies nidificantes y migratorias. La población total de aves en Veta la Palma alcanza los 600.000 individuos e incluye casi 250 especies, de las que más de 50 presentan algún tipo de amenaza en el resto de su área de distribución. El humedal artificial de esta finca juega un papel primordial para la conservación de las aves Europeas, asegurando el alimento tanto a las especies que completan su ciclo de desarrollo juvenil y pueden luego migrar, como a aquellas que, estando ya en migración entre África y Europa, se instalan temporalmente aquí para obtener alimento.

Las balsas de cultivo extensivo se caracterizan por su estabilidad en cuanto a superficie de inundación (3.200 ha), profundidad (40-50 cm), caudal de renovación (1 hm3/día en verano) y salinidad, lo que permite amortiguar los cambios de salinidad, caudal de agua y concentración de nutrientes del estuario, provocando un desarrollo masivo de microalgas capaz de asimilar los excedentes de nitrógeno y fósforo del agua. De esta forma, el agua captada en Veta la Palma es devuelta al río con una inmejorable calidad físico-química y microbiológica. Además, la creación de más de 100 islas en las balsas para la nidificación de las aves acuáticas, y la revegetación de sus 150 km de orillas,  han mejorado notablemente el paisaje de la finca. Por otro lado, la superficie inundada artificialmente juega un papel de extrema importancia en la protección de la fauna piscícola propia del estuario del Guadalquivir: especies migratorias como la anguila (Anguilla anguilla) o los albures (Mugil cephalus, etc.), otras que pasan parte de su ciclo natural en el estuario como el lenguado (Solea solea, S. senegalensis), la corvina (Argyrosomus regius) o  la lubina (Dicentrarchus labrax), y especies marinas como el boquerón (Engraulis encrasicholus) o la acedía (Dicologoglossa cuneata).

En un estudio realizado por la Estación Biológica de Doñana, se señala que “…para mantener la abundancia y diversidad de aves acuáticas en Doñana, es evidente la necesidad de gestionar zonas como Veta la Palma para que proporcionen una alta biomasa de alimento (invertebrados y macrófitos) para las aves”.

Veta la Palma está dentro de la Reserva de la Biosfera de Doñana y de la Red Natura 2000, y es un Humedal RAMSAR de Importancia Internacional.